sábado, 10 de julio de 2010

Cuando cierro los ojos.

Espero ansiosa que llegue la hora, esta rutina se ha convertido en una necesidad para mi.

Espero con ansias tu entrada por la puerta de atrás, tu beso, tu mirada, que aunque no la veo, la siento sobre mi.

Tus palabras me reconfortan y sobre todo me haces reír. Das alegría a este corazón tan necesitado, haciéndome olvidar tantas cosas que me aterran.

Acabas de llamar a mi puerta, respiro, cierro los ojos y me abandono.

Gracias lindo sapito (me da miedo besarte y que te conviertas en príncipe)

No hay comentarios:

Publicar un comentario